Cuida tu salud en 4 pasos

Tomar acción sobre tu salud y enfermedad crónica

Esto, además de frustrante, conlleva en ocasiones un elevado coste en distintos profesionales, en desplazamientos y en diferentes productos como suplementos o dietas. Puede llegar a ser tal el agotamiento de estos pacientes que lleve al abandono de los tratamientos y la paralización del paciente en su participación sobre su propia salud. Cuida tu salud en 4 sencillos pasos que te ayudarán a tomar acción de nuevo, recuperar la motivación y afrontar un proceso de mejora de la salud. Estos pasos también son de utilidad para aquellos pacientes con una enfermedad sin diagnosticar. O aquellos que sin haber llegado a realizar ese periplo han decidido tomar acción y ser responsables de su salud y de su condición crónica.

Paso 1: Buscar Información sobre mi enfermedad

1 - Infórmate

El primer paso es hacernos cargo de la información relacionada con nuestra enfermedad crónica.
Paso 1: Buscar Información sobre mi enfermedad

Muchas personas dejan recaer el peso exclusivamente en sus médicos, esperando que sean ellos quienes les proporcionen toda la información necesaria. Y pensar esto es perfectamente válido ya que son los profesionales de la salud los encargados de orientarnos respecto a nuestras enfermedades.

Sin embargo, a veces no profundizan a la hora de transmitir los conocimientos sobre la enfermedad, o dan por hecho que el paciente no está interesado en conocer más.  A veces, la falta de tiempo en la consulta no permite esa profundización. Debemos saber que tenemos el derecho y la obligación de preguntar a nuestro médico todo aquello que nos preocupa.

La verdad es que todo el conocimiento debería estar en manos del paciente que sufre la enfermedad a diario, y que cuando hablamos del manejo de un enfermedad crónica debemos ser conscientes de que nuestra participación e implicación son fundamentales. Esto es especialmente importante si los tratamientos disponibles son insuficientes para proporcionarnos la mejoría que deseamos.

Además, en la mayoría de las enfermedades crónicas son fundamentales aspectos del estilo de vida como la dieta, el ejercicio, el consumo de tabaco o alcohol o el control del estrés entre otros. La mayoría de médicos no suelen proporcionar información a este respecto.

Por tanto, el primer paso es  buscar información de calidad y confiar en los expertos que están trabajando sobre tu enfermedad en la actualidad para aprender de ellos todo lo posible. Hoy en día también hay acceso a todas las investigaciones relacionadas con el tema. Así que ya sabes, la información es poder.

Paso 2 - Busca a tu especialista médico idóneo

2- Busca los mejores profesionales

Una vez que eres tu propio experto en tu enfermedad, es el momento de buscar a los profesionales que más se adecúen a tu caso.

Esto puede ser especialmente difícil si llevas numerosos intentos poco exitosos con médicos y distintos profesionales. La recomendación es buscar una combinación de varios profesionales considerando médicos, psicólogos, nutricionistas, fisioterapeutas… Puedes seleccionar diferentes profesionales, según las características de tu enfermedad.

Por ejemplo, si se trata de una enfermedad gastrointestinal, tu médico especialista digestivo, un psicólogo especialista y un nutricionista o coach nutricional.

En este punto tienes que valorar según tus recursos de tiempo y dinero a qué profesionales tienes acceso. Puede ser buena idea la combinación de tratamientos online y presenciales.

Siguiendo con el ejemplo anterior, puedes decidir que vas a asistir a las citas con tu digestivo de manera presencial en tu ciudad por la sanidad pública y él te llevará los tratamientos farmacéuticos que necesites, las pruebas médicas y hará seguimiento de tu progreso.

Puedes contemplar contar con un psicólogo privado presencial a domicilio de manera paralela. Por otra parte, puedes decidir asistir a un nutricionista o coach nutricional de manera online espaciando las sesiones según te convenga.

Hay infinitas combinaciones posibles, sólo tienes que dar con la que mejor se adapte a tu situación. Es importante no emprender el camino solos y recordar que siempre puedes cambiar de profesional si no estás cómodo con los actuales o no tienes los resultados esperados.

Grupos de apoyo para gente con enfermedades crónicas

3 - Grupos de apoyo

En el camino hacia la recuperación de la salud es muy normal que haya recaídas, que los nuevos hábitos nos sean muy difíciles de implementar o que nos sintamos solos...

Puede ser de gran ayuda contar con un grupo de personas que sufran la misma enfermedad que nosotros con los que poder hablar y compartir experiencias.

Puede que en tu zona no encuentres un grupo de apoyo de tu enfermedad, si es así, puedes intentar hablar con tus profesionales de la salud para que te ayuden a formar uno por tu zona. También hay grupos de apoyo online con gente de otras ciudades o incluso otros países.

Gracias a estos grupos podemos mejorar nuestro apoyo social, mejorando nuestro estado de ánimo, podemos compartir información útil sobre la enfermedad, comprometernos con nuestras nuevas rutinas e incluso puede ser útil a la hora de acceder a mejores condiciones en ciertos productos o compartir gastos.

Por ejemplo, en el caso de enfermedades gastrointestinales, se pueden organizar reuniones en las que preparar comidas saludables semanales para todo el grupo de manera que sea más fácil y divertido implementar este nuevo hábito.  Además, podemos comprar grandes cantidades de productos más costosos como alimentos sin gluten o sin lactosa, o verduras y frutas ecológicas… a mejor precio.

Autocuidado en enfermedades crónicas

4 - Plan de autocuidado en situaciones especiales

Por último, es importante planificar una serie de acciones que nos ayude a sobrellevar nuestra enfermedad en momentos clave.

Este plan va más allá de las acciones que estemos implementando con nuestros profesionales de la salud, aunque podemos elaborarlo en conjunto con un psicólogo o coach si hemos decidido contar con ellos.

También podemos elaborarlo por nuestra cuenta. Se trata de poner por escrito aquellas acciones que nos pueden ayudar en aquellos momentos en que nos encontremos con dificultades en nuestra vida debidas a la enfermedad.

De manera sencilla,

  • ¿Qué cosas me pueden ayudar y hacer sentir bien cuando me encuentre mal?
  • ¿Qué puedo hacer en situaciones en las que mi enfermedad suponga una dificultad?

Las acciones a poner en marcha dependerán de nuestra enfermedad y de cómo nos encontremos.

Ejemplos de acciones a tomar cuando estemos mal pueden ser:
  • tomar una infusión que nos guste y nos siente bien,
  • poner en práctica una técnica de meditación,
  • darnos un baño relajante,
  • aplicar calor,
  • ver una película de humor o nuestra serie favorita,
  • leer un libro que nos guste,
  • salir a pasear,
  • aromaterapia,
  • musicoterapia,
  • hablar con algún amigo o familiar…

En ocasiones en las que la enfermedad nos impida hacer algo hay que buscar acciones alternativas que nos agraden.

Por ejemplo, en una enfermedad gastrointestinal, si no podemos comer tarta en un cumpleaños y esto nos hace sentir mal, podemos ofrecernos a llevar nosotros un postre que podamos tomar o decidir no comer tarta y tener preparada en casa alguna comida que nos guste para cuando volvamos.

No necesariamente debes seguir todos los pasos aquí indicados, pero pueden servirte de guía a la hora de formar tu plan de acción sobre tu enfermedad crónica. Cuida tu salud con algunos de estos 4 pasos y podrás mejorar tu calidad de vida y bienestar. No es sencillo, se trata de reconstruir una vida, pero debemos tener presente que nuestra salud merece la pena y que poco a poco serán los resultados positivos los que nos empujen a seguir en la dirección correcta.

Así que, no lo dudes y cuida tu salud siguiendo estos 4 pasos. Debemos confiar en el poder que tenemos para recuperar nuestra salud y en nuestra capacidad para llevar a cabo todo aquello que nos propongamos.

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